El principal responsable de la sequÃa inédita en la Amazonia fue el cambio climático, no El Niño
Un estudio en el que participaron cientÃficos brasileños encontró que este tipo de eventos extremos pueden darse hasta una vez cada 15 años si la temperatura de la Tierra sigue en aumento
FUENTE: DIARIO EL PAIS
La sequÃa inédita que vivió la Amazonia el año pasado hizo que se registraran los niveles más bajos de los rÃos en 120 años. Manaos y otras 20 ciudades de Brasil tuvieron que declarar estado de emergencia por la poca disponibilidad de agua, y la región del lago Tefé se hizo famosa a nivel mundial porque allà flotaron muertos más de 110 delfines. Una catástrofe climática. Varias aldeas quedaron incomunicadas, pues se secaron los rÃos que usan como vÃas de transporte, y en otros paÃses como Perú y Colombia hubo alertas por la mortandad de peces por las altas temperaturas.
En aquel momento surgió la pregunta de qué tanto tenÃan que ver el fenómeno de El Niño y el cambio climático en este evento extremo. ¿A quién culpar? La sospecha entonces era que a ambos. Ahora, un reciente estudio elaborado por la iniciativa World Weather Attribution (WWA), en el que participaron cientÃficos de Brasil, PaÃses Bajos, Reino Unido y Estados Unidos, da una respuesta certera: fue el cambio climático, y no El Niño, el principal causante de la excepcional sequÃa que se vivió en la cuenca del Amazonas durante junio y noviembre de 2023.
La brasileña Regina Rodrigues, profesora de la Universidade Federal de Santa Catarina y una de las coautoras del estudio, explica que la definición de una sequÃa implica varios elementos. Está la sequÃa meteorológica, por ejemplo, en la que únicamente se tiene en cuenta la baja precipitación o la falta de lluvias para analizarla. ?En este caso, encontramos que tanto El Niño como el cambio climático jugaron un rol en la sequÃa del Amazonas, algo asà como un 50% y 50%?. Pero también está lo que se conoce como la sequÃa agrÃcola, en la que, además de la precipitación, se tiene en cuenta la evotranspiración. ?Si hay mucha evaporación, el clima será más seco. Y como la evaporación está muy relacionada a las altas temperaturas, bajo esta definición de sequÃa sà encontramos que fue el cambio climático el que jugó un mayor rol?, asegura la experta. ?En un clima más frÃo, que una sequÃa asà se diera, serÃa extremadamente raro?, apuntan los investigadores.
El estudio, como unos 50 más que ha realizado WWA para conocer cómo influyó el cambio climático en la intensidad y la probabilidad de un fenómeno extremo, usa una metodologÃa que ha sido revisada por pares y que es aplicada en cada ocasión para el evento que se está analizando. En palabras muy cortas ? cuenta Rodrigues ? lo que se hace es un modelamiento viendo qué pasarÃa con un fenómeno (como la sequÃa) si jamás se hubiesen emitido las cantidades de toneladas de CO2 que han llegado a la atmósfera desde la era preindustrial. ?Después, comparamos estos datos estadÃsticamente con lo que vemos ahora e, incluso, con el clima futuro?, explica.
AsÃ, por ejemplo, llegaron a la conclusión que, con el clima actual, la probabilidad de que se dé una sequÃa meteorológica asà en el Amazonas es de 1 cada 100 años, mientras que para la sequÃa agrÃcola el escenario cambia a 1 cada 50 años. Sin embargo, bajo un posible clima en el que la temperatura promedio del planeta no aumente más de 2°C comparado a niveles preindustriales (el plan B del Acuerdo de ParÃs, que tiene como meta no pasar de 1,5°C), la probabilidad de tener una sequÃa meteorológica en el Amazonas pasarÃa a ser de 1 cada 30 años aproximadamente, mientras que para la sequÃa agrÃcola el riesgo de repetirla es de 1 cada 10 ó 15 años. En pocas palabras, serÃan escenarios más frecuentes y probables frente a un planeta más caliente.
Se trata de un llamado de alerta para que los paÃses que son parte de la Amazonia se preparen para un futuro que cada vez es menos incierto y, en cambio, nos da pistas de que efectivamente lo que viviremos será más extremo.